La cebolla es un alimento con propiedades medicinales y nutricionales muy importantes. Es rica en antioxidantes, especialmente quercetina, que ayuda a combatir los radicales libres y reducir la inflamación.
También contiene compuestos sulfurosos que fortalecen el sistema inmunológico y favorecen la salud del corazón. Consumir cebolla puede ayudar a controlar los niveles de azúcar en la sangre, mejorar la digestión y prevenir infecciones bacterianas. Además, tiene efectos diuréticos, lo que favorece la eliminación de líquidos retenidos.
La cebolla también es beneficiosa para la piel y el cabello gracias a su contenido en vitaminas C y B6, así como minerales como el potasio y el manganeso. Comer cebolla regularmente puede contribuir a una mejor salud general y al bienestar del organismo.
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